Emilio Froján, cofundador y CEO de Velca: «La transición energética debe hacerse de forma inclusiva: ser accesible y asequible para todo el mundo»

Emilio Froján, CEO de Velca, una de las marcas españolas de vehículos 100% eléctricos que está cambiando la forma de moverse por las ciudades, nos habla de la importancia de avanzar en una transición energética respetuosa con el entorno.

Por Rafael Hernández

Según datos del Fichero Informativo de Vehículos Asegurados (FIVA) de Unespa, en España circulan actualmente 33,3 millones de vehículos, entre turismos, ciclomotores, furgonetas, etc. Ante estos números debemos plantearnos los efectos que generan estos vehículos. Según Emilio Froján, CEO de Velca, la marca surge de una profunda convicción sobre el futuro de la movilidad, la cual debe ser además de funcional, respetuosa con el entorno. Ante la necesidad de abordar los desafíos ambientales y urbanos, surge la visión de crear una marca que ofrezca vehículos eléctricos que no solo destaquen por su diseño elegante y su calidad, sino que también sean eficientes en términos de energía. 

¿Por qué es necesario cambiar la forma en la que nos movemos?

Las emisiones de dióxido de carbono son las más elevadas en toda la historia de nuestro planeta y nosotros como seres humanos debemos tener conciencia de esto. Somos los máximos responsables para lograr que estas emisiones de dióxido de carbono y gases contaminantes se reduzcan. Hoy en día, la mejor manera de hacerlo es mediante la implementación de movilidad cero emisiones, principalmente en esos entornos donde hay más grado de contaminación. 

Es considerado por Forbes como uno de los protagonistas del cambio en España. ¿Desde cuándo es plenamente consciente de la importancia de cuidar el entorno y el medio ambiente? ¿Es Velca su granito de arena a un mundo mejor?

Todos los proyectos en los que he trabajado a lo largo de mi vida tenían incorporadas proyecciones de impacto social o impacto medioambiental. Nunca he trabajado en algo sin pensar en un propósito a medio o largo plazo que pudiese mejorar la calidad de vida de las personas, de las ciudades o de entornos medioambientales. En este caso, Velca tiene la visión de mejorar la calidad de vida y la convivencia en las ciudades. 

Dada la importancia que tienen las energías limpias en la transición energética, ¿cómo ve el desafío de hacer que la movilidad eléctrica sea accesible y atractiva para un público más amplio?

La movilidad eléctrica no ha sido accesible en los últimos años. Nosotros estamos preocupados porque esta transición sea inclusiva, accesible y asequible para todo el mundo. No queremos que la transición energética genere ventajas competitivas para las rentas altas y desventajas para las rentas medias y bajas. Por eso, periódicamente proponemos a distintas instancias gubernamentales, políticas de incentivos para facilitar la adquisición de vehículos vía reducciones de impuestos, bonificaciones en el IRPF y subvenciones a la compra que estén mejor definidas de lo que están hoy en día. 

España ha experimentado un crecimiento significativo en las matriculaciones de motocicletas eléctricas. ¿Cómo cree que este aumento se relaciona con la creciente conciencia sobre la importancia de la transición energética?

Desde el año 2016 las matriculaciones de motos eléctricas han crecido un 1200%. Es una obviedad que la presencia de la moto eléctrica en el parque automovilístico está avanzando a gran velocidad, pero también es cierto que hemos visto un parón en los últimos dos años, por lo que esperamos que con las nuevas políticas de incentivos todo esto pueda mejorarse. Todavía hay muchísimo por hacer. Solamente el 2,5% de las motos que tenemos en España son eléctricas, por lo tanto, hay todavía 97 motos de cada 100 que en los próximos años intentaremos cambiar y para hacerlo un producto lo más atractivo posible tenemos que trabajar en factores como la velocidad, la autonomía del vehículo y otras prestaciones. La gente no te compra únicamente porque seas sostenible o porque emitas menos dióxido de carbono o menos óxido de nitrógeno. Tenemos que hacer un producto atractivo, sexy, funcional, un producto que a nivel de diseño cumpla con todas las necesidades que quieren los consumidores y convertir lo eléctrico en algo guay, en algo deseable. No solo desde la perspectiva de sostenibilidad, sino también desde usabilidad, funcionalidad, diseño y fiabilidad.

¿Cómo va a ayudar el impacto de las restricciones de tráfico en el ámbito urbano y cómo los vehículos eléctricos pueden desempeñar un papel crucial en la mitigación de estos desafíos?

Las ciudades tal y como las conocemos fueron diseñadas pensando en los coches. Todas las arterias, las venas que hay en una ciudad, esas calles, esas avenidas, esas autopistas, se hicieron pensando en los coches. El 70% del espacio público en las grandes ciudades es para los coches. La tendencia que estamos viendo en los últimos 10 años es que los ciudadanos, la vida, la convivencia de las personas, está reconquistando el espacio público que durante los últimos siglos había sido dedicado a los vehículos. Las motos ocupan cuatro veces menos que los coches y en estas restricciones progresivas que está habiendo al tráfico rodado, especialmente de vehículos pesados, la incorporación de la moto es una opción muy ventajosa para aprovechar mejor el espacio y poder destinar más espacio público a la vida de las personas, a juegos, al deporte o a que las personas se puedan mover con bicicletas o andando, que es la mejor manera de moverse. 

En términos de la industria de vehículos eléctricos, ¿cuáles considera que son los mayores desafíos para avanzar en la transición energética y cómo Velca y otras empresas pueden abordar estos desafíos de manera efectiva?

Los desafíos son la reducción de las emisiones que generan el efecto invernadero y las que perjudican a la salud de las personas. Por un lado, en cuanto a las que afectan a los gases de efecto invernadero, como puede ser el dióxido de carbono, la propuesta de una marca como Velca es clara: una moto eléctrica emite solamente 17 gramos de dióxido de carbono por kilómetro. Esto es menos de lo que emite per cápita un metro o un tranvía, cuatro veces menos que un coche eléctrico y diez veces menos que un coche de combustión. El ahorro a nivel de dióxido de carbono que se produce en una moto eléctrica es enorme. Además, más del 60% de los viajes que se hacen en coche propio dentro de la ciudad son de tan solo un pasajero y además son de menos de 5 km, que es una distancia perfecta para hacer en un ciclomotor o en una moto eléctrica. 

En 2023 publicó su libro Gratitude: Reflexiones de un emprendedor agradecido. ¿A qué está usted agradecido?

Pues este es un libro que escribí, con todo el cariño del mundo, a mis amigos y a todas las personas que nos han ayudado a levantar este proyecto. Montar una fábrica o una empresa de motos viniendo desde una familia humilde y sin muchos recursos económicos solamente es posible cuando cuentas con el apoyo de muchísimas personas y cuando cuentas con el apoyo de tu familia. Es un libro para celebrar la gratitud, para celebrar la amabilidad que mucha gente ha tenido con nosotros al apoyarnos desde el minuto cero en esto.

¿Cuál es el próximo desafío que tiene por delante?

Cada día es una batalla y aparecen nuevos desafíos. Lo que puedo decir es que yo tengo la actitud de no parar, seguimos con la ilusión intacta desde el primer día, la misma pasión, la misma energía, las mismas ganas. Hay 20.000 millones de problemas, pero hemos creado un entorno y un ambiente de trabajo que te enchufa y te recarga las pilas diariamente. No sé cuáles serán los próximos desafíos, pero creo que es importante siempre mantener o saber de dónde puedes sacar esa energía positiva para poder enfrentarte a los desafíos que están por llegar y que reconozco que todavía los desconozco.